jueves, 28 de enero de 2010

Volviendo

Hace un calor que no se aguanta. Y estamos en pleno enero, el mes del verano y sería un despropósito quejarse de estas temperaturas.


La vagancia atacó todos los rincones de la casa. Mientras escribo, mi gata se apoya sobre mi brazo y dormita como en el mejor de los almohadones. Mira de reojo y vuelve a dormirse.




Mi hijo estuvo con fiebre...por esos virus que nunca se explican.




Sólo la revolución de tus besos me salva en estos días. Pequeños grandes detalles de mi vida cotidiana.


"Muero de tí , amor, de amor de tí,


de urgencia mía de mi piel de tí,


de mi alma de tí y de mi boca


y del insoportable que yo soy sin tí."


Jaime Sabines